Vuelvo a ocuparme de mi blog

De paso recupero artículos míos en los desaparecidos portales suite101.net y asturiasliberal.org o artículos borrados de la versión electrónica de abc, preservados por archive.org o por la memoria caché de google.

LA CITA DEL MES: Cyrano de Bergerac

"Mais on ne se bat pas dans l'espoir du succès ! Non, non ! C'est bien plus beau lorsque c'est inutile ! "

Mostrando entradas con la etiqueta jesús poveda. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta jesús poveda. Mostrar todas las entradas

miércoles, 28 de diciembre de 2011

El pecado del Dr. Poveda

Resulta afortunado que el escudo de España no lleve águilas, osos o leones, porque el animalito que mejor simboliza nuestra idiosincrasia nacional es la hiena.
La hiena es ese carroñero que se alimenta de crías indefensas y de bichos moribundos. A la hiena no le gusta correr riesgos, y aquí la violencia estatal nunca se manifiesta contra el fuerte o el agresivo sino contra el débil, el pacífico.
Los españoles nos dividimos en dos campos, los protegidos y los pateables. Aquí puedes quemar una bandera española en público, y no te pasa nada; puedes invadir una capilla con las tetas al aire, y no te detienen; puedes insultar a monjas o jóvenes peregrinos que no se meten con nadie, u organizar procesiones "ateas" que consisten en humillar las creencias de millones de personas. Nadie te hará nada, no te tocarán un pelo.

Y es que el catolicismo o la nación española son atacables, pertenecen al ámbito de lo no-protegido, de lo desacralizado, de lo pateable.
En cambio el abortismo es uno de los mandamientos de la Nueva Religión que tiene su Vaticano en Génova o Ferraz -cada vez veo menos diferencias-  y si hace falta la puedes imponer a palos. Podéis ver en el vídeo siguiente (colgado por Ciencia y Vida) a varios números de la policía maltratando HOY a un individuo. Ese individuo es un pecador, un blasfemo, ¡un réprobo!


El individuo en cuestión no es un proetarra tirando cócteles molotov, ni ciscándose en las víctimas del terrorismo, ni supone ningún peligro para el Orden Público. El individuo en cuestión es doctor en Medicina y profesor en la Universidad Autónoma de Madrid. Se trata de Jesús Poveda, un ejemplo de dignidad y de coherencia.
D. Jesús Poveda de Agustín es un señor que opina -como opinamos muchos millones de personas- que el aborto es una abominación. Desde hace años, el día de los Santos Inocentes, el Sr. Poveda se reúne con otros que piensan como él y se manifiesta ante los abortorios donde trocean niños. No tira ladrillos, no insulta, no amenaza, se limita a protestar, a manifestar unos sentimientos que compartimos muchísimas personas, solo que él es más valiente.
Si el Gobierno de Mariano Rajoy no cesa fulminantemente a los responsables de la Seguridad en Madrid, tendremos que pensar que al Gobierno de Herodes le sigue el de Poncio Pilatos -fijaros en las iniciales- que los niños por nacer no tienen quien les defienda y que las nuevas autoridades en España son igual de ruines y cobardes que las anteriores.
Y para evitar en lo sucesivo agresiones como la sufrida por el Dr. Poveda, la mejor solución sería quitar de una vez esos siniestros abortorios de Madrid. La Comunidad tiene sobradas competencias para cerrarlos todos. ¿A qué espera? Ya no hay excusas para mantener ese negocio repugnante en nuestra capital.