Despertarse antes que el sol y ver amanecer en el Retiro: un programa vital. Los fantasmas de la noche se subliman de golpe cuando el sol va cogiendo carrerilla. Un cielo azul, espectacular, droga dura de la que no puedes prescindir al cabo de los años.
La identidad de Madrid no es la Puerta de Alcalá, ni el Palacio de Oriente, ni las torres inclinadas de Kio, ni Cibeles, ni Neptuno. Mi DNI, mi ADN es el cielo azul, azul, azul en el que se pierden los ojos.
Madrid con lluvia es una interesante figura teórica, un concierto de música contemporánea, de esos en que el autor busca desagradar al público y que le aplaudan al final, ¡genial, genial! Yo soy un clásico: prefiero el Vals de las Olas, las torrijas bien gordas, perderme en Roma, y pasear por el Retiro. Y Madrid es el sol, a ver cuando tenemos un Gobierno en condiciones que obligue a que llueva sólo por la noche, cuando no molesta.
Ese sol de Madrid, me diréis que también brilla en otros lugares. No lo dudo; la misma obra se estrena y reestrena en otros lugares, La Luz de España no es más que otra versión de La Luz de Grecia o La Luz de Italia, sin duda. Pero la función la veo aquí, y me aboné a este palco hace muchos años.
¡Luis!
ResponderEliminarMe ha encantado tu reflexión matutina.
Estoy contigo: a mi también me enamora el cielo azul de Madrid...
Pero, hoy, por motivos que sólo unos pocos saben...¡tengo ganas de ver la luz del Mediterráneo!
Gracias por este despertar tan agradable.
Ladyfun
Estoy con Ladyfun, y contigo, Primitivo. A mí también me encanta este sol, tan temprano, por mucho frío que haga...
ResponderEliminarGracias Luis, así da gusto empezar el día, te imagino tumbado en el césped, inmerso en la profundidad de ese azul... buen finde!
ResponderEliminarOye, gran petición esa de prohibir la lluvia diurna Así le llovería encima a los niñatos del botellón que dejarían de dar p. c. a los que queremos dormir. ¡Qué idea!
ResponderEliminar¡Me ha encantado esta reflexión Luis!
ResponderEliminarUna abrazo,
Iñaqui
Admirado Luis, tienes razón, el azul madrileño es un azul muy especial.
ResponderEliminarA veces lo he querido comparar, pero es imposible, no hay otro
Felices Pascuas!!!!!
Besos
Mª Jesús
¿Sabes porqué estoy de acuerdo contigo, a pesar de que a mí esta ciudad nunca me gustó?, porque cuando hablas del cielo y del sol de Madrid de lo que en realidad estás hablando es de un un prodigio irrepetible, único incluso para un asturiano enamorado de Canarias: el cielo de Castilla.
ResponderEliminarEn el asombroso sortilegio de su amanecer, o en la magia inexplicable de su crepúsculo.
De Madrid el cielo.
ResponderEliminar(No “al” cielo como repetimos).
Pero hazme caso: vete un día lejos de la ciudad. Túmbate, por la noche, panza arriba y mira las estrellas que el cielo de Madrid oculta.
En mi pueblo, de niño, comprobé que el cielo es casi blanco si no hay luna. Echo de menos esa visión prácticamente a diario. Nada mas impresionante para el ojo humano.