Vuelvo a ocuparme de mi blog

De paso recupero artículos míos en los desaparecidos portales suite101.net y asturiasliberal.org o artículos borrados de la versión electrónica de abc, preservados por archive.org o por la memoria caché de google.

LA CITA DEL MES: Cyrano de Bergerac

"Mais on ne se bat pas dans l'espoir du succès ! Non, non ! C'est bien plus beau lorsque c'est inutile ! "

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lunes, 1 de septiembre de 2014

Enesei es Dios y Aisirich su profeta

En su día, para evitar que los italianos de bien votaran por los comunistas, un publicista inventó un eslogan que funcionó: "Nel segreto della cabina elettorale, Dio ti vede, Stalin no!”
Era una forma de culpabilizar al votante potencial y díscolo, para que se autosincerara, venciendo los compromisos, rompiendo las cadenas de la hipocresía, de la soledad, del pecado... Esa técnica de autocontrol del votante se la copiaron a los educadores decimonónicos que, para evitar que los jóvenes se volvieran locos matándose a gayolas, usaban argumentos similares: "Cuando creas que nadie te ve, etc. " o "¿Qué diría tu madre si te viera?"
Por desgracia, a los padres de la Moral y las Buenas Costumbres les preocupaba más la lucha contra el solitario vicio que el saqueo de las naciones o los amables genocidios domésticos. Nadie le dijo a los chicos de Lehman Brothers o a los consejeros de las Cajas de Ahorros "cuando nadie te ve, choricillo mío, Dios si te ve". Nadie le dijo a ejemplares católicos como Ruiz Mateos o Jordi Pujol que robar es pecado... Nadie le dijo a Leopoldo II de Bélgica, a Mao, a Adolfo Hitler o al citado Stalin "¿qué diría tu mamá si te viera asesinar a tanta gente, eh?" Así que unos saquearon el mundo y otros lo cubrieron de cadáveres, pero bueno, no rendían tributo a Onán, que hubiera sido lo  realmente grave. ¡Gran consuelo para sus víctimas!

Enesei se sirve de Guguel y Aisirich
Ahora cuando estoy frente al ordenador, no sé quién me ve pero seguro que la NSA (que se pronuncia Enesei) lo sabe mejor que yo. Durante un tiempo pensé que Google era Dios (ver aquí), ya que tiene respuesta para todo, es omnisciente y omnipresente... Pensé que la famosa G de los masones era la G de Google, y tal. Pero las escamas acabaron cayendo de mis ojos y descubrí la verdad: Guguel no es Dios, es sólo un profeta. La Enesei es el verdadero Dios y tiene muchos profetas. Guguel, Feisbuc y ahora un super-Google, ICReach, que se pronuncia Aisirich y que sólo pueden usar ellos. ¡Yo también quiero Aisirich!  ¡Aisirich para todos! Aisirich es algo así como un Arcángel de Enesei, un mediador del gran Metatrón. Espero que Aisirich me tenga fichado, me daría mucha pena pensar que no me consideran Person of Interest...
Le tengo mucho cariño a Enesei, porque es como un miembro más -no forzosamente viril- de la familia. A veces le rezo y todo. Si en lugar de tener como sello un águila presuntuosa y colchonera sujetando una llave hubieran elegido algún símbolo más atractivo, no sé, la foto de Mata Harri, por ejemplo, la enmarcaría y la pondría sobre mi mesilla de noche y al cerrar los ojitos pensaría "Con la Enesei me acuesto y con la Enesei me levanto". La Enesei me conoce mejor que nadie, mejor de lo que me conocerían una novia, un confesor, un psiquiatra si tuviera novia, confesor o siquiatra. Escucha mis conversaciones telefónicas, apunta mis búsquedas por internet, entra en mi ordenador, copia mis fotografías, mis entradas de tuiter y de feisbuc, vamos, que es lo más parecido al Ángel de la Guarda o a un cuñado cotilla que existe.
Lo que no sé es qué hará Enesei con toda la información que tiene acerca de mí, no sé si analizarán cuidadosamente mi colección de fotos de enanitos de jardín horteras para brujulear si detrás se esconde una gran conspiración mundial para colocar a Wyoming en el puesto de Obama o imponer la Sharia en el Lidl de mi barrio... Mientas no se despeje esa duda, no sé si podré dormir.

martes, 25 de enero de 2011

Una alternativa a Google: duckduckgo

Google funciona muy bien
Los productos de Google -empezando por su buscador- funcionan de maravilla y han revolucionado la cosa informática. Especialmente con el tema de las noticias, los mapas, los blogs, los libros, los correos. De hecho Google funciona tan bien que no tiene alternativa ni competencia: vive de la publicidad en lugar de cascarte derechos de uso como Microsoft y sus servicios son tan buenos que todos hemos abandonado jotmeil para pasarnos al gemeil, etc. Ningún investigador serio puede pretender pasar de google books. El único petardo de google es el traductor, que yo utilizo como máquina poética. A mí Google me cae muy bien pero no quiero acostumbrarme a usar sólo productos Google.

En los servidores de Google está nuestra intimidad
El problema de Google es que lo sabe todo sobre ti y sobre mí y eso puede llegar a ser peligroso. Google realiza un seguimiento de tus búsquedas, sabe si te gustan rubias o morenas, con quien vas, con quien quedas, puede leer tu correo gmail -está en sus servidores- puede vender tus datos más íntimos a compañías que sabrán que estás interesado en sus productos, etc. Y no te digo la gente que esté todavía dada de alta en feisbuc o que use los elementos de google o feisbuc en su teléfono móvil...
Conste que no digo que lo hagan, pero que sí pueden hacerlo.
A mí me confió Mirameba que tenía pruebas de que la G de los masones no es "God" o "Geometry" como se pensaba desde el siglo XVIII, sino "Google"; algún día Skynet se conectará a Google, asimilará en dos segundos todo el conocimiento humano, todos los mensajes de todas las personas, se volverá autoconsciente, omnisciente y lanzará terribles Terminators sobre el mundo. Convencido estoy de que si Orwell hubiera conocido la cosa informática, Google is watching you sería el lema de 1984.

La seguridad no existe
Google sabe que su negocio depende de la sensación de seguridad que proporcione y suponemos que se gasta una pasta en medidas de todo tipo para custodiar nuestros datos; pero el caso uiquilics ha demostrado que las cautelas y precauciones son perfectamente violables y revolconables por parte de desaprensivos. Si Julian Assange ha puesto a la venta los correos oficiales de las embajadas americanas que se suponían protegidos por la NSA, la CIA o la TIA, una de dos, o esas organizaciones rebosan de traidores -hipótesis bastante probable- o la seguridad se la ha diseñado el Profesor Bacterio. Y no pretenderá nadie que una empresa -por puntera que sea- puede ofrecer más seguridad que una agencia como la NSA. De ser cierto ese extremo, habría que fusilar al amanecer a todos los responsables de la seguridad norteamericana desde el Presidente hasta el cabo Smith.
Imagínate que un listillo viole los servidores de Google y tus mensajes personales acaben siendo comentados por Belén Esteban en cualquier programa tipo La Noria. Imagínate ese mensaje tuyo en que le dices a tu churri: "voy a comer tallarines con gambas en tu ombligo" leído y comentado por el insaciable cotilla Tochischi; o que las constantes búsquedas que haces en google de "rubias añiñadas con las uñas pintadas de verde" llegaran a ser conocidas por tu suegra, y cosas así.

Duckduckgo
Antes tenía puesta como página de arranque google en español ahora tengo esta otra que es más modesta pero no funciona mal, se llama

https://duckduckgo.com/

No puede compararse con google en lo que se refiere a imágenes, libros, vídeos, etc. pero ofrece resultados abundantes e interesantes.
Tenéis una opción en "settings" para potenciar resultados en español o en otros idiomas.
No sé si aguantará mucho pero por ahora funciona. Podéis ponerlo como página de arranque, a ver qué tal rula. Aunque no tengo mucha fe en ninguna alternativa a Google porque si una compañía fuera lo suficientemente potente como para poner un buscador rival, o bien no funcionaría o bien acabaría comprada por Google, o bien acabaría haciendo lo que hace Google.
Si no queréis perder las potencialidades de Google -especialmente para una herramienta de investigación como google books- podéis seguir usando el megabuscador para búsquedas neutrales -a ti no te importa que los demás sepan que te interesa viajar a Venecia o que buscas una vieja edición de la Historia Antigua de Rusia de Karcasov- pero reservad las personales al pato Duck.

viernes, 19 de marzo de 2010

La vida de un chino

¿Cuánto vale la vida de un chino?
Recuerdo que hace años -demasiados- escribí un ensayito sobre los Estados Caníbales, aquellos en los que los sátrapas no contentos con asesinar a sus vasallos, además se los comían.
El canibalismo es el ejercicio más puro del poder sin límite, la suprema forma de derrota para el vencido: servir de cena al vencedor. El canibalismo nos recuerda que la diferencia entre los hombres y las bestias del campo es apenas un barniz de cultura y otra capa todavía más fina de educación moral.
Por lo demás, cada día entiendo más aquella vieja canción de Roberto Carlos, El Progreso, la del estribillo "Yo quisiera ser civilizado como los animales". A Roberto Carlos le preocupaban las ballenas, en 1979; a mí, en 2010 me preocupan los chinos.
Estados caníbales han sido México bajo los Aztecas, la Alemania hitleriana en que pretendían hacer jabón con el personal y ahora la República Popular China donde los mandamases comunistas no sólo exterminan a los opositores sino que los convierten en piezas de recambio para transplantes.
Un órgano de información casi tan visceralmente asocialista como yo, La Gran Época, no hace sino confirmar un día sí y otro también, el tráfico de órganos organizado por los peores sátrapas de un mundo inmundo en el que el beneficio es el alfa y el omega de todas las cosas: en China se creó la madre de todos los monstruos, el comunismo capitalista, es decir, un régimen en que los derechos de los gobernados y los trabajadore no existen, un mundo sin sindicatos, ni libertad, ni oposición. Mordor. Cuando Google se enfrentó a la dictadura China, ninguna voz, salvo la de Hispalinux, siempre tan clara e independiente, se levantó para aplaudir la iniciativa de la corporación americana. Al contrario, Telefónica se dedicó a atacar a Google al mismo tiempo que la dictadura china, ejecutando una espero que involuntaria pinza: quizá es que los monopolios económicos y los políticos están destinados a entenderse.
Ese régimen que aborrece la libertad como los vampiros a la luz del sol, tiene martirizados a 1300 millones de seres humanos, 1300 millones de chinos cuya vida a nadie le importa como no le importan a nadie los cien millones de seres humanos abortados en la tripa de sus madres o asesinados al nacer por sufrir la grave tara de su sexo.
Y todos nuestros gobernantes, TODOS, han ido a rendir pleitesía a los amos de Pekín: tenían práctica, sus abuelos hicieron lo mismo con el amo de Alemania, en los años treinta. No cambiamos.
En los billetes de dólar está inscrita la expresión "In God we Trust". Por algo será. ¿Cuantos millones de chinos serán inmolados al verdadero Dios de este mundo? ¿Cuántos dólares vale la vida de un chino?