Decía un soplagaitas catalán -de esos hay muchos- que era mejor una Cataluña pequeña que una España grande. Y es verdad que la burguesía catalana es experta en países pequeños: Luxemburgo, Liechtenstein, Andorra, Monaco, Islas del Canal... No conozco gente más ducha en geografía de sitios pequeños y oscuros que la gente bien de Barcelona. Así que cuando Artur Mas exige la independencia fiscal de Cataluña, sabe muy bien lo que hace.
El alzamiento (de bienes) de Magomo
El padre, Artur Mas Barnet, se fumigó la empresa familiar especializada en ascensores, MAGOMO, "Mas Goberna y Mosso S.A." que suspendió pagos en 1979. Puede leerse en El País de aquellos días que la suspensión de pagos fue por la diferencia entre un activo de 257 millones y un pasivo de 146 millones. Algo más de cien millones de pesetas de las de entonces.
En realidad no debía faltar dinero puesto que a Artur Mas Bernet le detectaron dos millones de euros en Liechtensttein. Se benefició, como siempre en España, de la correspondiente prescripción, la misma comedia de siempre: La Fiscalía Anticorrupción (ja, ja ja) le pidió al juez Santiago Pedraz el archivo de las diligencias (jo, jo, jo) y por eso no fue procesado. No consta que los acreedores de MAGOMO cobraran y suponemos que las indemnizaciones cobradas por los obreros fueron moderadas.
L'hereu de su papá
Arturo junior ahora es heredero, con sus hermanos, del dinero honestamente evadido por su padre. No consta que, dada la naturaleza de dicho dinero, Arturo junior haya renunciado a su herencia en favor de alguna entidad caritativa. No sé cómo se dice edificante en catalán: ¿edificant?
En el libro que le dedicó la periodista Montserrat Novell, habla con respeto Mas de sus antecesores: "A mi abuelo y a mi padre siempre les preocupó más la calidad del producto que fabricaban que hacer dinero". Es muy recomendable un excelente artículo de Arturo San Agustín que puede leerse aquí y del que extraigo algunos datos.
Mi querido amigo, lo peor es la prédica del individuo ese respecto al paraíso al que va a conducir a los catalanes, sin siquiera moverse de casa.
ResponderEliminarNo es que el verdadero Paraiso, el contenido en la promesa evangélica, no sea de este mundo. Ni siquiera es que los paraisos en la tierra hayan sido infernales, hasta la fecha.
No. Es que hay que ser memo para creerse que ese tipo puede llevar a alguien a ninguna parte.