Vuelvo a ocuparme de mi blog

De paso recupero artículos míos en los desaparecidos portales suite101.net y asturiasliberal.org o artículos borrados de la versión electrónica de abc, preservados por archive.org o por la memoria caché de google.

LA CITA DEL MES: Cyrano de Bergerac

"Mais on ne se bat pas dans l'espoir du succès ! Non, non ! C'est bien plus beau lorsque c'est inutile ! "

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miércoles, 7 de octubre de 2015

El facebook comunista, el facebook islámico y el facebook socialista

Facebook es algo fascinante. Comprendo que el Sr. Zuckerberg sea millonario. Cuando miras las funciones, la flexibilidad, las posibilidades que ofrece, y además gratis total... Estos inventos sólo pueden nacer en sociedades libres y de derechas. Podríamos imaginar el limitado éxito que tendría una herramienta como feisbuc en otras sociedades.

El facebook comunista. 
Para acceder a Feisbuc tendrías que darte de alta con tu nombre y apellidos de verdad,  el Comité de Inquisición de tu barrio se aseguraría de que tú eres tú y tendrías que tener impóluto tu expediente social.
Sólo habría UN perfil, el de Fidel Castro o del puto loco de Corea del Norte que nunca me acuerdo de su nombre. Fidel poniendo miles de líneas de texto, una tras otra...Y todos los demás, tendrian a su disposición dos botones, el botón "Aplauso Interminable" y el botón "Inquebrantable Adhesión al Jefazo". El Jefazo tendría 20 o 30 millones de amigos. En cambio los amigos en cuestión no tendrían más amigo que el Jefazo.  Además, como diría Coluche, en los países comunistas tú no miras la tele, es la tele la que te mira...

El facebook islámico
En el feisbuc islámico sólo habría perfiles diferenciados para los tíos. Las tías sólo pondrían como foto de perfil un saco negro de esos que se usan para transportar muertos al Depósito y como no pueden hablar en presencia de hombres, pues ya me dirás para qué quieren tener un perfil. 
En el feisbuc islámico cualquiera puede darse de alta pero lo que está limitado son las conversaciones: aleyas del corán, insultos a los judíos, insultos a los cristianos, insultos para los sunitas en los perfiles chiitas, insultos para los chiitas en los perfiles sunitas, insultos para el progreso, el liberalismo, las puestas de sol y los cacahuetes fritos con miel, que no vienen en el Corán así que deben ser malos. Siendo moros, es del todo indiferente lo que opinen así que sólo hay un botón que permite expresar la grandeza de Alá: Alahú Akbar.

El facebook socialista
No hay, porque los fondos asignados los robaron.


domingo, 5 de abril de 2015

I have a dream

¡Precioso acto de nuestros Rectores y Decanos leyendo un  manifiesto de solidaridad con los estudiantes de Kenia! Estaba Wert rodeado por los representantes de nuestra Universidad, encendiendo un pebetero en honor de los mártires del pensamiento contra el fanatismo.... Pero todavía más emotiva ha sido la multitudinaria manifestación de musulmanes, en Atocha, solidarizándose con las víctimas de los grupos islámicos... Me acuerdo muy bien de algunas pancartas: "No somos Al-Shabab" "No somos el Isis" "Yo también soy cristiano". Cientos de miles de musulmanes españoles, casi un millón, creo...
Luego me desperté.

domingo, 11 de enero de 2015

Crónica de una manifa francesa en Madrid

Ayer recibí la convocatoria de una manifa que se iba a celebrar hoy a las doce en la Puerta del Sol. La convocaban unos chavales, en solidaridad con las víctimas de los atentados de Francia.
Cuando llegué -un par de minutos tarde- había doscientas o trescientas personas en silencio. Unos levantaban lápices, otros cartelitos de "Je suis Charlie" o "Soy Charlie" en solidaridad con los dibujantes y personal de Charlie Hebdo asesinados. 
A mí Charlie Hebdo me parecía vomitivo, siempre estaban metiéndose con los católicos, el Papa o Monseñor Vingt-Trois, o con el mismísimo Jesucristo. Pero claro está,  yo limitaba mi anticharlihebdoísmo a no comprar la revista que es lo que hacemos todos cuando no nos gusta una revista. De hecho, el Papa y monseñor Vingt-Trois han condenado el atentado, que es una agresión contra nuestras libertades, la libertad de prensa y de expresión.
Hoy día como todo el mundo tiene un peaso cámara que pa que te quiero contar en el móvil, todo el mundo hacía fotos de todo el mundo. Sobre la fuente de Sol unos señores, no sé si periodistas o convocantes nos hacían fotos a los manifestantes. Y muchos manifestantes hacían selfis o tomaban fotos de los que nos tomaban fotos.
Yo venía con unas ganas locas de cantar la Marsellesa, como en Casablanca, que queréis que os diga... Pero cantarla solo no me apetecía.
Al cabo de quince minutos se rompió la opresión del silencio. Empezaron a hablar los jovencitos que habían convocado el acto. Quizá hubiera sido mejor que hablaran en francés, porque el español no era lo suyo. Primero habló un tío llamado Benjamín -a éste se le entendía- que nos reprochó ser pocos. Benjamín es joven y no debe tener mucha experiencia en la vida, eso es algo que nunca haces en una reunión. Aunque vengan sólo el calvo, el cojo y el de la guitarra, tienes que decir "Gracias por haber venido y por ser tan numerosos, bla, bla". Son técnicas; ya aprenderá Benjamín... Luego habló una chiquita que se emocionó y nos contagió su emoción. En un momento dado no podía hablar así que aplaudimos para animarla. Bien. Luego hablaron otros dos -uno de ellos llamado Louis- que la verdad necesitan mejorar su expresión en español pero quizá cultiven el acento extranjero para ligar, no sé, yesui fransé olalálamur porqueyolovalgo. Finalmente habló gente de otro nivel, empezando por un representante de los judíos españoles, Raphael Benatar, que recordó que en Francia hay gentuza antisemita, dijo lo que había que decir,  recordando a los cuatro judíos asesinados cuando iban a comprar al supermercado kosher y recordó la famosa frase que no es de Voltaire pero todos le atribuyen de "no me gusta lo que Vd. dice pero lucharé hasta la muerte para que tenga el derecho de decirlo". Benatar se expresa igual de bien en francés y en español e hizo un alegato de amor a Francia y recordó a las cuatro víctimas judías asesinadas que iban a comprar al supermercado kosher para preparar el sábado. Luego una señora llamada Isabel habló de lo mucho que debe a Francia por su educación, etc. Eché de menos un representante de la comunidad musulmana. Más tarde me enteré de que los musulmanes, en Madrid, habían convocado su propio acto en Atocha. Hoy tenían la ocasión de sumarse en lugar de autorestarse del conjunto. Nadie se acordó de invitar a un representante de los católicos, víctimas de Charlie Hebdo pero que no han matado a ningún dibujante.
Lo mejor de todo es que tras una consul de Francia habló un señor que no me enteré de quién es que nos hizo cantar la Marsellesa. ¡Por fin! Y yo a voces, con mi aux armes citoyens formez vos bataillons, ¡me encantó!

jueves, 8 de enero de 2015

La expulsión de los moriscos no debiera ser la solución

Europa se despierta una vez más con la noticia de un atentado realizado por musulmanes en nombre del Islam, o de su propia versión del Islam.

Moriscos y berberiscos
Hace cuatro siglos, en 1615, se publicaba la II Parte del Quijote. En ella aparece un personaje, Ricote, morisco víctima de la expulsión. Cervantes conocía muy bien el mundo musulmán puesto que había pasado varios años cautivo en Argel. Y reproduce en el drama humano de Ricote el drama de los musulmanes expulsados.
Un millón trescientos mil cristianos de España, Italia y el sur de Francia fue esclavizado por los berberiscos durante los siglos XVI al XVIII. De ellos trescientos mil se libraron de su cautiverio, convirtiéndose... Un pequeño porcentaje de ellos fue redimido, es decir, que se compró su libertad -caso del propio Cervantes- y la mayoría acabó su vida en el olvido y la esclavitud.
Los moriscos eran tenidos por sospechosos de ayudar a los piratas berberiscos. Al final, la "solución" consistió en la expulsión escalonada que empezando en 1609 concluyó en 1613. Las correrías berberiscas no terminaron con ello pero ya no hubo musulmanes en territorio peninsular.
 
Las comunidades musulmanas deben tomar la iniciativa
¿Qué lección podemos sacar de esa triste historia? Sin duda Europa ha evolucionado, hemos superado la identificación tierra-religión, y el nacionalismo ya sólo lo practican separatistas marginales. Pero, indudablemente, sería bueno que la comunidad musulmana española expulsara de su seno cualquier deseo de confraternización con terroristas, yihadistas o demás basura criminal. Porque en caso contrario, acabarán sufriendo las consecuencias, de un modo u otro, aunque esas consecuencias no sean más que el miedo, la desconfianza y la antipatía de los demás españoles. Todavía están a tiempo.
Lo mismo podemos decir de los musulmanes franceses o de otras naciones europeas. No se trata ya tanto de pedir que piensen en las víctimas de los terroristas sino en velar, casi diríamos que egoístamente, por sus propios intereses.

domingo, 13 de julio de 2014

La sangre de los otros

En estos momentos un multimillonario saudí goza contemplando las imágenes de la guerra en Palestina. A su lado tiene a una de sus siete mujeres, la más jovencita, la que sólo tiene diez años a la que esta mañana enseñó cómo hay que dar de correazos a los criados filipinos, que amén de pobres son cristianos, azotables y exterminables. La niña no quería, no le gustaba la idea de pegar a la pobre Jenny, pero al final descargó su correazo sobre la espalda de la esclava.... Buenas chicas, cada una en su papel, ¡y él es el director de escena!
El Saudí observa con sumo placer el cacao que han montado sus amigos de Hamas. Secuestrar y asesinar a tres chicos no es nada, lo bueno es lo de los cohetes. Cincuenta millones de dólares tienen la culpa de los nuevos ataques de Hamas sobre Israel. Cincuenta millones que son la humilde aportación del saudí. Un diez por ciento de sus beneficios del año -¡Alá se lo recompensará con creces!- Total, ya no puede comprar más casas, ni más coches, ni más nada... Es tan rico que ha llegado a conocer ya todas las dimensiones del aburrimiento.
Hay que reconocer que los chicos de Hamás son honestos. No se han quedado con la pasta, hasta el último dólar lo han gastado en comprar a través de Teherán los magníficos cohetes chinos que bombardean Israel... Una pena que no acertaran al reactor de Dimona, imagínate la catástrofe radiactiva... Y los primeros irradiados, los propios palestinos de Gaza, todo el sur de Israel y el Oeste de Jordania, una verdadera pena.
Pero esto es sólo el apertivo. El Saudí ha pagado otros cinco millones para diez  voluntarios palestinos que ya están vestidos de blanco. Se van a volar en distintos mercados, autobuses y universidades israelíes. Ya están depilados, y han realizado las rituales abluciones... Algunos tienen sus dudas, lo de volarte en pedazos no tiene mucho futuro, pero el mulá de turno se encarga de repetirle las chorradas habituales, que sí, hombre que sí, que en el momento mismo en que revientes, te acogerán en sus brazos setecientas huríes y te bañarás en ríos de leche y miel, chaval, y a tu familia no le va a faltar de ná...
Dentro de unos días el saudí volará no en pedazos -una pena- sino en avión privado hasta Sotogrande a su fabuloso palacio donde dará fastuosas fiestas en honor de príncipes españoles y británicos a los que en el fondo desprecia profundamente. El saudí es coleccionista: durante un tiempo se interesó por los coches de lujo, las villas romanas y toscanas, hoteles en París y cosas así, pero últimamente le divierten los bufones, como a Felipe IV. No hay nada más gracioso que un rey destronado o un príncipe europeo genuflexo ante el petrodólar. Un día de estos tiene que hacer saltar al príncipe Klaus o al Archiduque Fritz por un aro o vestirlos de bailarina con tutú...
Al Saudí le gusta acariciar las nalgas de la niña mientras ve la televisión...observa a los desesperados palestinos, huyendo de los bombarderos... Buena propaganda para la gente de Hamás, ahora los judíos resulta que son los malos...¡Qué divertido! Y mientras se recrea ante la imagen de los inocentes corriendo, el Saudi experimenta una oleada de placer...

martes, 20 de diciembre de 2011

Nuestro islámico futuro



 
Comentaba en mi entrada anterior que, si nos atenemos a su discurso, Rajoy no tiene previsto realizar nada en el ámbito familiar -al margen de sacarnos del paro- ni luchar contra el aborto -más de ciento diez mil niños cortados a cachos en España el pasado año, de los cuales 20.496 sólo en Madrid- a pesar de catástrofe demográfica española. Pues yo ya sé quién va a disfrutar de esa prometida prosperidad: los españoles musulmanes, benditos sean.

El Islam imprevisto
Estoy aburrido de recibir incontables emilios denunciando el supuesto peligro de la islamización de Europa. Sobre todo porque no se trata tanto de una victoria de los hijos de Agar como del fruto de dos siglos de anticristianismo feroz en el Continente cristiano por antonomasia.
Francia, por ejemplo, ha sido la patria del laicismo desde la separación, brusca y dramática, de la Iglesia y del Estado. Los laicistas han estado particularmente obsesionados contra la Iglesia Católica, el enemigo a batir desde que Voltaire proclamara "Écrasez l'Infâme". Y durante ese dos veces secular combate contra la Cruz, que llevó a tantos clérigos y monjas a la guillotina o al paredón, se han olvidado de que había otras religiones, otros credos, a los que no se perseguía.
Hace algo más de un siglo, el presidente Loubet y el ministro Combes expulsaban a miles de sacerdotes, disolvían congregaciones enteras, y ponían trabas a la tarea evangelizadora de los misioneros católicos en el África del Norte bajo dominio francés. Fruto inesperado de ese anticatolicismo es la victoria del Islam que nadie esperaba ni previó, cosa de lo más normal en el curso de la Historia. El Principio de la Responsabilidad Histórica de Mirameba y su corolario lo dicen claramente:
1. el que tiene el poder nunca se entera de nada
2. el que se entera de algo, carece de poder.

En España hemos seguido los pasos de Francia, pero la responsabilidad no es sólo de los laicistas sino de la propia Iglesia. En Cataluña, por ejemplo, la iglesia no es más que un instrumento al servicio del separatismo. Así, mientras los prelados catalanes se entregan al  nazi-onanismo catalanista y permiten que se aborte en sus hospitales, sus calles se han llenado de musulmanes. Si lo piensas bien, no deja de tener su gracia, suena como a castigo bíblico; pero dado como está el patio, el Islam no es un castigo, sino una bendición.

Calle de Marsella
Hoy el Islam es la religión más pujante de Francia, el futuro religioso del país. Las laicas instituciones quieren ponerle parches al tema, un día hacen una ley contra  el velo, y otro votan leyes que prohiben las oraciones públicas en la calle. Con la ley francesa en la mano, ¿se suprimirían en España las procesiones de Semana Santa? En este sentido, el Islam se ha convertido en un inesperado aliado pasivo del anticristianismo de los laicoborrokas. Además, esos parches legales son contrarios a la Declaración Universal de los Derechos Humanos que consagra la libertad religiosa en su artículo 18: 

"Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia".

Curiosamente, ese artículo que muchos musulmanes se pasan por las narices -al apóstata, al que deja el Islam, Mahoma autoriza a matarlo, así como suena- sin embargo les protege en las naciones que asumen la obligación de respetar tanto la fe como sus manifestaciones.
 
Sin futuro
La verdad, es que no tengo especial simpatía por las creencias islámicas o el modo de vida de los musulmanes. Islam significa sometimiento y musulmán significa sometido; y yo soy muy rebelde; cada día más. Pero el hecho es que nuestros queridos hermanos musulmanes tienen hijos a racimos; yo no. Podría deciros lo mismo de muchos gitanos ejercientes, judíos ortodoxos e incluso de movimientos cristianos ultrasupermegacarcas. Su modo de vida no me atrae en absoluto, ni su visión de la mujer, ni sus costumbres, ni sus creencias. Pero ellos tienen hijos, y yo no; ellos tienen futuro y yo no. ¿De quién es la culpa? Solo mía, suya no.

La niñofobia de la España oficial
A los españoles en general les encantan y divierten los niños. Pero la España oficial es niñófoba. A una española le ponemos más fácil abortar que encontrar una guardería para sus hijos, y lo de conciliar la vida laboral con la familiar suena a chiste malo: si pides permiso de maternidad en una empresa, te echan. Así de claro.
Para daros una idea del alto grado de gilipollez de nuestras autoridades, os diré que en el  corazón de Madrid hay edificios públicos gigantescos como el Banco de España o el Ministerio de Sanidad, que no tienen guardería. Si por casualidad alguno de los miles de hombres y mujeres inteligentes y currantes que trabajan en el Banco de España o en Sanidad comete el desliz de tener algún hijo, no puede llevárselo al curro. Hablo de un ministerio y de instituciones que debieran dar ejemplo y ser la pauta del comportamiento, bla, bla, etc., tralalá. De verdad, si yo tuviera una fracción de poder, os garantizo que iba a convertir medio Madrid en una inmensa guardería repleta de churumbeles, pero no os preocupéis, no se dará el caso.

En España, toda la estructura familiar ha sido asesinada a sangre fría desde hace más de un cuarto de siglo por los responsables de mantener un entorno económico cuyo objeto es claramente antifamiliar: sin guarderías y con pisos imposibles de adquirir. Dos generaciones de españoles sin nido. Los ricos sí tienen hijos y sus mujeres pueden incluso trabajar, que para eso hay otras mujeres que atienden al niño a cambio de un sueldo. ¡Gran modelo! La libertad de una persona a cambio de la servidumbre de otra... Así, nuestra sociedad va a su colapso; las parejas machistas triunfan y las mujeres más brillantes, las que trabajan y estudian, una de dos, o pueden pagar una sustituta o se quedan sin hijos o tienen uno solo, y ya tarde. Por eso somos el país que más adopciones realiza de todo el mundo. Ya hace un montón de años, recuerdo que escribí en un libro ahora obsoleto el siguiente párrafo:

Por otro lado la pretendida gran familia europea, más que familia parece un asilo de personas mayores, enfermas, egoístas, cascarrabias y sin hijos, que sólo tienen fuerzas para discutir entre ellas y amargarse mutuamente lo que les queda de vida. Tras el suicidio demográfico occidental, el viejo Continente es un continente de viejos. El futuro de Europa consiste en la paz de los cementerios y de las cunas vacías. Así que el debate monarquía-república, en el deprimente contexto del ocaso general de Occidente, no reviste la menor importancia.

Un trabajo de 1997 publicado en 1999, doce años ya... ¿Véis algún cambio?

El islam es el futuro
Por eso, si muchos ven a los musulmanes como una amenaza, yo prefiero verlos como un ejemplo. El islam es el futuro.
Ellos han acertado; nosotros nos hemos equivocado. Después de trece siglos, Tarik, finalmente, ha regresado, y esta vez para quedarse. Por si las moscas, yo me he comprado un método de árabe sin esfuerzo, para ir adaptándome. Porque musulmanes serán los me cuidarán y musulmanes serán los que me limpien el culo si llego a viejo y sobrevivo a los neonazis de la eutanasia; porque los enfermeros no se llamarán Pepe, Marichús o Manolo, sino Mohammed, Dris o Fatima. Ya sé que serán españoles y hablarán español, pero el Corán hay que leerlo en árabe clásico, así que tendré que aprender cómo se dice en V.O. eso de Lā 'ilāha 'illā-llāhu Muhammad rasūlu-llāh.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Nunca más la guerra... espero.


¡La guerra! Uno de los jinetes del Apocalipsis... Los dichosos jinetes que los teólogos no saben cómo interpretar. Uno de los pocos símbolos apocalípticos que no parece dudoso es el del caballo pardo: "Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo viviente que decía: Ven. Salió un caballo pardo; al jinete le encargaron que retirase la paz de la tierra, de modo que los hombres se matasen. Le entregaron una espada enorme".
 La más segura fórmula para sufrir una guerra consitse en exhibir la propia debilidad. Yo no sé cómo está de verdad nuestro ejército, ni cuáles son las intenciones del sátrapa marroquí. Al fin y al cabo la ministra saliente sancionó a unos militares españoles por poner una bandera española en un monte español y todas sus aspiraciones se reducen a organizar cursillos sobre las diferencias de género en el ámbito artillero, que supongo que pepinazo es una expresión machista, retrógrada y discriminatoria.

Dejando de lado a los chifladoz y zuz miniztroz, podemos hacernos una serie de preguntas: nuestro ejército, ¿está bien? ¿Tiene los medios necesarios para defendernos? ¿Cómo anda de ánimos? ¿Qué ocurriría si nos ataca Marruecos?

Hace trece siglos, en el 711, los moros invasores no necesitaron de grandes batallas ni escabechinas: les bastó llegar a acuerdos con los nobles locales, que los privilegiados son sangre de Judas y carne de traición. Si Marruecos atacara, ¿podemos fiarnos de lo que harían los amos de algunas autonomías? ¿Entregaríamos Alicante, Canarias, Ceuta o Melilla con la misma facilidad con la que entregamos el Sahara?

El otro día oí al inmenso Juan Pando recordar en la radio algunas duras realidades acerca de la guerra, mientras evocaba la increíble matanza de la I Guerra Mundial: las guerras no paran por la noche, ni los fines de semana; las guerras matan, y mucho.

 Otras generaciones han conocido la peste, el hambre, la guerra... Mi generación es la primera de la historia de Europa que no ha conocido ni la guerra, ni la peste, ni el hambre.. Me gustaría que siguiera siendo así.

Los militronchos son gente seria, sobre todo los que tienen en su hoja de servicios el "valor acreditado" de quien ha vivido situaciones esdrújulas; nadie más razonable ni pacífico que quien ha visto y olido los cuerpos destripados y despedazados en un campo de batalla. Es un olor que te acompaña el resto de tu vida...

En cambio los que montan guerras  u organizan cacaos que sólo pueden desembocar en guerras suelen ser gente que no ha hecho ni la mili y para la que las batallas son un remedo infantil, una especie de videojuego que les permite jugar a los soldados.

Recuerdo a este respecto que cuatro días antes de la ofensiva americana en Irak, el 16 de marzo de 2003, el Papa Juan Pablo II, durante el rezo del Ángelus improvisó un discurso tan sentido como sencillo que se resume en "Nunca más la guerra".
"[...] io appartengo a questa generazione che ricorda bene, ha vissuto - e grazie a Dio  sopravvissuto - a [la] seconda guerra mondiale, e per quest, per questo ho anche il dovere di ricordare a tutti questi giovani, più giovani, che non hanno questa esperienza, di ricordare e di dire, mai più la guerra".
Traducido viene a ser:
"Debo decir que pertenezco a esa generación que recuerda bien haber vivido y gracias a Dios, sobrevivido a la Segunda Guerra Mundial, y por eso tengo el deber de recordar a todos estos jóvenes, más jóvenes, que no tienen esa experiencia, de recordar y de decir, nunca más la guerra.
Puede oírse en esta grabación la voz del viejo Karol, con su pila de años, su Parkinson a cuestas, y toda la lucidez de su experiencia.

El Papa se autoplagiaba. Ya había, en enero de 1991 leído una oración en el mismo sentido.
No pretendo con estas palabras decir que todas las guerras son malas: las hay si no justas, al menos necesarias, pero antes de soltar los caballos del Apocalipsis, conviene pensárselo y dar voz a quienes por su experiencia y vocación son los primeros interesados en mantener la paz; me refiero, claro está, a los militares.

sábado, 26 de junio de 2010

Defensa crítica de Israel

Israel es el único país que, por lo visto, no tiene derecho a existir

Israel tiene pocos amigos y muchos enemigos
Hace cincuenta años, Israel tenía muchos amigos. Estaba fresca la memoria del Holocausto así que los mismos que criticaban el colonialismo de Francia o de Inglaterra se deshacían de entusiasmo al glosar y justificar la ocupación judía de Tierra Santa.  Todos imaginaban que el Estado hebreo iba a convertirse en una suerte de Arcadia, que los desiertos iban a florecer -de hecho, florecían- que una sociedad más limpia y más justa iba a surgir al borde del Jordán, al abrigo de la inteligencia laboriosa de aquellos inmigrantes.  Recuerdo al respecto un libro extraordinario de Julián Marías, Imagen de la India e Israel: una resurrección, obra que conserva toda su actualidad y que releo a veces, con cierta tierna melancolía. Y digo melancolía porque hoy, salvo a José María Aznar y a cuatro gatos más, Israel no le importa a nadie. Son ya 62 años de Independencia y, también, de un drama interminable. Los gobiernos de Israel y la propia situación han conseguido hartar a todo el mundo, incluso a sus ya escasos amigos, como lo era Turquía.
Aznar ha acertado plenamente con su defensa del derecho a existir de la república judía, pero su voz no se oye dentro de la gran cacofonía de los adversarios de Israel.

Criticas razonables, actitudes aberrantes y silencios clamorosos
Con ocasión de la inadmisible y estúpida matanza de activistas en un barco turco, Israel está recibiendo muchas críticas, algunas de ellas tan razonable, como la que publicó Darío Valcárcel en ABC.
Esas lógicas y muy legítimas observaciones se ven acompañadas por otras actitudes asombrosas como la de discriminar a los homosexuales judíos de las celebraciones previstas del "orgullo gay" de Madrid porque "el ayuntamiento de Jerusalén no ha condenado el ataque ".
Según esa misma regla de tres, tampoco podrían participar los gays de Madrid en el Orgullo Gay de Madrid, ya que el Ayuntamiento de la capital no ha condenado dicho ataque, ni falta que hace: ¿desde cuándo los Ayuntamientos entienden de política exterior? No deja de ser curioso que los organizadores de la Marcha del Orgullo Gay se pongan a la altura de los ultraortodoxos judíos que tampoco quieren "que se sodomice a Jerusalén" (en la foto).
Pero a esas críticas, tanto las razonables como las aberrantes, otros unen palabras de muy distinto calado que, como siempre, concluyen que sería mejor que Israel no existiera y le dan coba a los terroristas que ponen bombas en Israel o lanzan cohetes contra Israel.  Los mismos que siempre están dispuestos a criticar al Estado hebreo, mantienen un silencio clamoroso cuando las víctimas son judíos y  nunca los veréis manifestarse por la libertad de Guilad Shalit, el soldado israelí secuestrado por Hamas hace ya cuatro años y mantenido en cautiverio desde entonces. Para haceros una idea, cuatro años es casi tres veces el tiempo que permaneció en un zulo José Antonio Ortega Lara.

Los dudosos amigos de Israel
De la situación de Israel y su tremenda soledad, da idea el hecho de que entre sus defensores actuales estén los herederos espirituales de quienes vieron con indiferencia o alegría el Holocausto. Por ejemplo Gianfranco Fini, (foto de la derecha) un fascista mussoliniano, sucesor de Giorgio Almirante, y reconvertido en demócrata de toda la vida. Pensaréis, ¿se habrá, como Fraga, comprado un bombín en Londres? Pues no, ¡él, se puso una kipá! Almirante y Fini son los hijísimos de la República de Saló, el estado fantasma creado por Mussolini, donde se persiguió con particular saña a los judíos italianos. Mi memoria histórica es algo tan íntimo, tan interiorizado, tan intestino, que cuando veo a Fini ponerse la kipá experimento insondables retortijones... Está bien que la gente evolucione, pero desconfío de esos Pablo de Tarso de pacotilla que siempre caen del caballo cuando se les aparece la oportunidad de medrar.
Otro que tal, Jean Marie le Pen, notorio antisemita y admirador confeso del mariscal Pétain, intentó imitar a Fini y demostrar que el fascismo reconvertido y el sionismo podían congeniar, sobre la base de una obesión antimusulmana; de hecho hubo judíos franceses que llegaron a apoyarle y analistas que publicaban en  un medio israelí tan poco sospechoso como Haaretz las razones de ese supuesto apoyo. Aquel proyecto se frustró porque Le Pen es una acémila al lado de Fini; carece de la habilidad y de la inteligencia del boloñés, y no le importa insistir, en plena sesión del Parlamento Europeo, en su curiosa teoría de que las cámaras de gas son un detalle de la historia. Dan ganas de invitarle a él y a sus partidarios a tomarse una duchita de gas Ziklon: "sólo un detalle, Sres., sí, sí, por favor, pasen Vds. a esta habitación, que ahora mismo vamos a proporcionarles una visión directa de la cuestión". No me desagrada esa  "solución final" para los negacionistas... ¡Es legítimo soñar!
A Israel también le sobran pesadísimos propagandistas que suelen cometer el error de querer defender el país de sus amores justificando a su gobierno -haga lo que haga, aunque se coma niños crudos- lo cual es una debilidad. En general los gobiernos no se caracterizan ni por su bondad ni por su santidad: hay que distinguir siempre entre los países y sus gobernantes, que ya sabemos quién es el Príncipe de este Mundo y cómo las gastan los poderosos.
Un consejo al respecto: cuando quieras hablar de un país, elogia sus espectaculares adelantos, el ingenio de sus científicos, su economía en expansión, su modernidad respetuosa de la herencia del pasado, la belleza singular de sus paisajes, su historia fascinante y tan desconocida, su variada gastronomía, su original arquitectura, sus curiosidades naturales, sus pintorescos bailes, los pájaros que hacen pío pío, los patos que hacen cuá cuá, los hermosos atardeceres, las aguas termales, las playas doradas, las cumbres nevadas, la armoniosa musicalidad de su idioma, el peculiar dibujo de sus neumáticos y la profesionalidad de sus meretrices; ¡pero no se te ocurra hablar del gobierno!
Y es que a la gente le gustan más las rosaledas que los ministros porque la gente, en el fondo, no es tonta.


Necesidad de una defensa crítica de Israel
Creo que Israel necesita amigos más que nunca, porque nunca ha estado tan solo. Así que me vais a permitir que saque el bulldog que llevo dentro  para, en primer lugar, poner a parir a los políticos israelíes y al sionismo; luego, a partir de esa postura hipercrítica, abogaré por el derecho de Israel a existir, que una cosa es el legítimo juicio a los actos de los gobernantes o a la mentalidad de la que surgieron, y otra muy distinta lo que se está fraguando: ni más ni menos que la justificación de la desaparición de Israel y vaya Vd. a saber qué  nueva tragedia.

VISIÓN CRÍTICA DE ISRAEL Y DEL SIONISMO

1) Es legítimo no tener simpatía por el sionismo
Como europeo, conozco bien el veneno nacionalista, los tóxicos religiosos o la ponzoña socialista. Por eso, el sionismo me parece una aberración histórica, producto de la mente de Theodor Herzl (a la izquierda) y del siglo XIX que vio nacer todos los nacionalismos -incluidos el vasco y catalán que seguimos sufriendo- y los demás ismos sangrientos: fascismo, comunismo, carlismo... La idea de "un país, una religión" es una patología por la que ya pasó Europa y la interpretación sionista del judaísmo no es más que un arcaísmo decimonónico, como el estatuto catalán o la crisis belga.

2) Hay elementos racistas en el sionismo
El sionismo contiene, además, todo el complejo racismo del judaísmo moderno, la idea de que una idea -es decir una religión, una fe- sería un privilegio divino transmitido por la sangre. El resultado de ese racismo teísta es que se niega a los hijos y nietos de quienes fueron expulsados de Tierra Santa el poder regresar a las casas de sus padres o abuelos, pero en cambio se concede sin dificultad la nacionalidad o el derecho de inmigración a un señor de Nueva York, Buenos Aires o Novgorod, en función de su fe. Así, al ius sanguinis o al ius solis se le superpondría un derecho basado en la religión, un ius religio a su vez conectado al ius sanginis por la creencia de que el judaísmo lo transmiten las mamás.
A veces me pregunto si los sionistas no acabarán buscando un "gen judío" en el ADN mitocondrial; ¿acaso no hubo en España quien buscara el "gen rojo" de los comunistas? Por no hablar de las investigaciones llevadas a cabo en EE.UU. a la busca del "gen gay" para explicar la existencia de los homosexuales. El próximo paso será la búsqueda del "gen merenge" y del "gen colchonero" en la población madrileña, o del "gen pelmazo" para explicar por qué me enrollo tanto...
Esa obsesión etnicista se muestra también en el diferente trato que se da a los terroristas según quién y de dónde sea el asesino: el asesinato de Isaac Rabin no dio lugar a "represalias" espectaculares porque el asesino era judío; fue juzgado y condenado, como es natural y probablemente se pudrirá en la cárcel el resto de su lamentable vida; en cambio cuando el terrorista es "árabe" o "palestino" se toman medidas de castigo colectivo y pagan justos por pecadores. ¿Qué hubiera pasado si el asesino de Rabin hubiera sido "árabe"? ¿Habría Israel bombardeado Damasco?
3) Filantropía racista
Incluso cuando las autoridades israelíes se muestran infinitamente más generosas que las demás naciones, como en el caso de las operaciones Salomón y Moisés, no pueden evitar manchar una bellísima acción con un toque de racismo. Salvar a miles de etíopes del hambre, era un acto totalmente bueno y ejemplar pero, ¿por qué salvar sólo a los falashas, a los judíos? ¿Os imagináis a un médico o un misionero cristiano salvando sólo a los niños cristianos de una hambruna o de un incendio? La opinión lo crucificaría; con toda razón. ¿Y cómo se lleva a cabo esa selección? ¿Pones a cien niños en fila y eliges a los judíos, para salvarlos y los demás los dejas morir? Y si te equivocas al seleccionar un niño, después de alimentarlo, medicarlo y desparasitarlo, ¿lo devuelves a Etiopía para que muera? Horripila la posible respuesta... Claro que si preguntáramos a los positivamente discriminados, es decir, a los falashas salvados de una muerte segura, probablemente nos digan todos a una "Viva Israel que me sacó del hambre y la muerte y me regaló la vida". Y tendrán razón. Y es que al agraciado en una lotería -por injustas que fueran sus reglas- no le pidas que devuelva el premio. Sobre todo si el premio es su vida y la de sus hijos.

4) Gobernantes terroristas
Israel ha tenido presidentes del gobierno que eran terroristas puros y duros, gentuza como Menahem Begin que ordenaba poner bombas en el Hotel Rey David -recientemente conmemorado como una gran hazaña por el chiflado de Netanyahu- o gentuza como Isaac Shamir, uno de los responsables del asesinato del conde Folke Bernadotte (foto abajo, a la izquierda), el mismo señor que salvó a miles de judíos durante la II Guerra Mundial.
Resulta asombrosamente cínico que personajes de esa calaña se quejen más tarde del terrorismo "árabe" sin considerar que con sus atentados legitimaban los de sus adversarios. Y todavía más asombroso que pretendieran dar lecciones de ética al mundo. O sea que si yo pongo una bomba, es resistencia, pero si la pones tú es terrorismo. Coherencia pura.
Los gobernantes de Israel y sus lamentables propagandistas  incurren de modo sistemático en el error de poner la etiqueta de antisemita a cualquiera que los critique, y buscan antisemitismo donde no lo hay ni lo puede haber. Aparte de que el abuso de la expresión diluye su eficacia, esa actitud no deja de recordar la de Franco, que consideraba que los "rojos" -verbigracia, los antifranquistas- eran antiespañoles o no eran españoles. Y es que los malos, siempre y en todas partes, practican el victimismo con idéntica desfachatez.

5) La inocencia perdida de Israel
Israel fue una gran ilusión, de la que no queda gran cosa. La falta de escrúpulos y una economía de guerra llevaron en su día a gobernantes de Israel a convertir su país en un gran exportador de armas -como España o Francia, dicho sea de paso- para financiar su despilfarro en seguridad; y fue también el único aliado de África del Sur durante el apartheid y ambos países mantuvieron una estrecha colaboración nuclear.
El mayor pecado de los gobiernos de Israel ha consistido en dilapidar el capital de simpatía acumulado tras el Holocausto, lo que podríamos llamar la herencia espiritual de Ana Frank, alimentando con su ceguera el secular antisemitismo. Esa política ha llevado a convertir una nación moderna como Israel en un gigantesco gueto rodeado por un muro inmenso tras 62 años de independencia que son otros tantos de conflicto permanente.

6) Ser aliado de Israel no es ningún chollo
Cuando se dice que Israel es el mayor aliado de Occidente en Oriente Medio, no se dice la verdad.
Los sionistas van a lo suyo -como todo hijo de vecino- y los israelíes no se van a inmolar para defender las libertades de España, Nueva Zelanda o Estados Unidos.
Miremos el pasado: fueron los británicos quienes conquistaron Tierra Santa sobre los turcos, y fueron los británicos quienes impulsaron la creación de Israel con la Declaración Balfour. Sin embargo los terroristas sionistas asesinaron a soldados británicos sin considerar cuánto le debían al Reino Unido.
En ocasiones, el gobierno de Israel ha traicionado a sus mejores amigos, robando material nuclear a los EE.UU. (el asunto Apollo) o robándole a Francia los planos del Mirage (asunto Frauenknecht).
A mi modesto entender, las ventajas tácticas que ha supuesto para Israel obtener esos elementos, nunca compensarán la desventaja estratégica de no inspirar confianza como aliado; su soledad obliga a Israel a gastar recursos disparatados en su complejo armamentístico y a pesar de ello no existirían de no ser por la perenne protección del Tío Sam. De ahí la pretensión de Aznar de meter a Israel en la OTAN, idea bienintencionada -Aznar es el único abogado que le queda a Israel- pero que a mí no me convence dados los enormes problemas que causaría a la OTAN meterse en el avispero de Tierra Santa a cambio de ninguna ventaja.

Y una vez puestos a parir los gobiernos de Israel y la idea sionista, es el momento de entonar una

DEFENSA DESAPASIONADA DE ISRAEL

1) Israel es una democracia, la única en su región
Algo que pocos quieren recordar es que Israel es una democracia, la única de la región.
La democracia no es una palabra ni un fin, sino un medio eficaz de gobierno. Las democracias son más flexibles porque permiten elegir a los gobernantes y darles la patada en el culo cuando la merecen. Eso las hace más complejas que las autocracias, pero también más fuertes.
Precisamente, lo que salva a Israel de sus peores fantasmas es su sistema democrático, mientras que  las satrapías que lo rodean no cambian y no pueden cambiar porque carecen de elementos de cambio. En Siria el dictador es el hijo del anterior dictador; en Jordania el que manda es un rey, hijo del rey anterior; en Egipto mandará probablemente el hijo del actual dictador. Y no hablemos de las monarquías absolutas de la península arábiga... Los autócratas se las pintan solos para arruinar un país, como el inefable Saddam Hussein, que llevó Irak al total desastre, o la pandilla de tarados que han gobernado -es un decir- Irán desde la caída del Shah.

2) Israel es el país más crítico con Israel
Precisamente, por ser una democracia y defender la libertad de prensa, los propios israelíes, sus políticos y escritores, son los mayores críticos de sus caudillos. Por eso estoy convencido de que Israel acabará saliendo adelante... si se lo permiten sus numerosos enemigos. Por eso no tengo el menor empacho en criticar el gobierno de Israel porque cualquier cosa que se me ocurra -aunque me la chive Mirameba desde su celda de Ciempozuelos- será mínima comparada con la saludable autocrítica que ejercen los israelíes sobre sí mismos. Y digo saludable porque la autocrítica es el ángel de la guarda que nos protege de nuestros íntimos demonios.

3) Si Israel es un estado absurdo, no lo es más que otros
Quizá el nacimiento de Israel fue un error. Pero también fue un error el nacimiento de ese largo centenar de naciones que con pretexto de "descolonización" y en nombre de nacionalismos locales han sembrado Asia y África de lágrimas y sangre; también fue un error, pienso yo, desmembrar la Hispanidad hace dos siglos en veinte naciones que no han conseguido ni el prestigio ni la riqueza que prometían sus caudillos, como el genocida Bolívar, o fue un error desmantelar el imperio Austro Húngaro. También fue un error que la caída del comunismo trajera el desmembramiento de la URSS; como decía el ya citado Julián Marías, de la expresión URSS hubiese habido que guardar la U de Unión. ¿De verdad son ahora más felices los georgianos, kazajos, turcomanos o kirguises? ¿Atan los ucranianos sus perros con longaniza? ¿Llueve café en los campos de Bielorrusia? No vamos a enmendar esos errores cometiendo ahora otro error, consintiendo en que se destruya lo que ya existe. En el fondo, naciones de verdad hay muy pocas en el mundo, y una de las más antiguas, España, probablemente desaparezca en breve, con la bendición del Tribunal Constitucional, así que quedarán todavía menos. Todo lo demás es artificial, reciente y frágil.
Considerad que el mundo necesita más y mejores escuelas y menos guerras. El coste de un solo caza de combate como el Lockheed Martin F-35 L2 alcanza 155 millones de euros, al cambio actual. Eso es más que el presupuesto anual de educación de muchos países.

4) Agravios comparativos
Una cosa es reconocer los pecados de los gobiernos de Israel o no tener simpatía por el sionismo, y otra muy distinta que por ello Israel tenga que desaparecer del mapa. Qué pasa, ¿no son racistas y fanáticos los líderes de los países de su entorno? ¿Hablamos de la situación de los coptos en Egipto? Nadie se plantea, sin embargo, que Egipto deje de existir... ¿Habéis visto muchas manifestaciones, en Madrid, contra la discriminación o el asesinato de los coptos?
De todas las naciones nuevas que han surgido en el planeta, de todos los estados y países, el único que aparentemente no tiene derecho a existir es Israel. Nadie pone en duda el derecho a la existencia del Chad o de Pakistán, nadie pone en duda el derecho a la existencia de Laos o Vietnam. Entonces, ¿por qué cáspita nuestros cutreZ y caZpoZoZ se suman a los antisemitas de toda la vida?
Recuerdo, con repugnancia, una campaña de "antisistema" que llevaban una pancarta que rezaba: "Israel meteros mi hipoteca por vuestro holocausto". Hay gente muy despreciable; y muy loca.
Es inimaginable que las Naciones Unidas se crucen de brazos cuando una basura interplanetaria como el presidente de Irán organiza un congreso internacional para negar el Holocausto, insultando la memoria de seis millones y medio de personas asesinadas por haber cometido el gravísimo pecado, por lo visto, de ser judías. Resulta inaudito pensar que semejante sabandija amenace la existencia de un país representando en la ONU como Israel, y que la ONU mire para otro lado.
A Israel todos quieren darle lecciones, sobre todo los menos acreditados para darlas como  los demócratas orgánicos de Irán y Venezuela.
Apoyar a Israel no significa decir que las salvajadas de su Gobierno no merezcan críticas, cada palo que aguante su vela; y si hacen el bestia, y matan gente, pues que soporten el chaparrón y se fastidien, como hacemos todos. Pero me gustaría que se criticara al menos con tanta intensidad las salvajadas de gobiernos de otros países.
Por ejemplo, la República Popular China donde se extermina a cualquiera que se oponga a la dictadura comunista  y se usan sus órganos para trasplantes. ¿Se plantea alguien que China deje de existir?
Recordemos la espantosa guerra Irán-Irak con su millón de muertos, que no era más que el reflejo de la maldad de Saddam Hussein y del odio inagotable de los chiitas por los sunitas. Sin embargo nadie se ha planteado que Irán o Irak dejen de existir.
La formación de Pakistán condujo a la muerte directa de cientos de miles de personas y el desplazamiento de catorce millones de refugiados; nadie se plantea que Pakistán deje de existir.
Corea del Norte es una espeluznante dictadura sometida a la misma familia desde hace medio siglo. El Destacado Líder Kim Zong Il amenaza constantemente a los pacíficos coreanos del sur con su arsenal atómico y bacteriológico. Millones de norcoreanos han muerto de hambre, gracias a la política de ese sicópata. Nadie se plantea que Corea del Norte deje de existir. Hace apenas dos semanas, Corea del Norte hundió un barco militar surcoreano, matando a 46 de sus tripulantes. Nadie se ha manifestado en contra de Corea del Norte o de su amo. La conclusión evidente, es que para los pacifistas y activistas del mundo, parece que sólo existe un malo a nivel internacional: Israel.

5) ¿Qué pasaría si cae Israel?
Supongamos que se cumple la peor de las pesadillas, y que tras una guerra Israel es vencido y tanques sirios se pasean por Jerusalén. Nuestra izquierda antiZemita -y algún nazi de los de toda la vida- se regocijará y brindará con champán porque es gente con más convicciones que cerebro; pero pensad un poco: ¿con Israel derrotado, ¿habrá mejorado el mundo? ¿Estaremos más seguros? De entrada, ¿dónde irán los millones de judíos que hoy viven en Israel? Primer problema, a menos que se pretenda exterminarlos con un segundo holocausto, ¿no?
Una vez derrotado el "enemigo sionista" como dice el bendito Osama, vendrá la imposición de la sharia, la reducción de la mujer a su estado de conejo reproductivo, el ahorcamiento de los homosexuales (foto de la derecha, en Irán), las lapidaciones de los adúlteros, las mutilaciones judiciales y todas esas simpáticas costumbres que constituyen el culto islam del siglo XXI. ¡Inch Allah!
¿De verdad os imagináis que nos van a dejar en paz si se les ofrece a Israel en bandeja de plata? Sanguinarios payasos que no han sido capaces de educar a sus pueblos y se han gastado en armas todo su presupuesto desde su independencia, ¿acaso no van a inventarse un enemigo nuevo? Pues irán a por los cristianos -los "cruzados" como ellos los llaman- porque los caudillos de masas ignorantes están condenados a buscar chivos expiatorios para distraer al personal. Si cae Israel, que Yahvé nos coja confesados, que algún nuevo Abderramán llegará no a Poitiers sino a Estocolmo.

6) Conclusión
La legítima crítica a los supuestos originales del estado hebreo o a la actuación de sus gobiernos, no debe servir de justificación para quienes persiguen la destrucción de Israel.
Cualesquiera que fueran los pecados de los gobernantes de Israel, nadie puede defender que Israel no merezca seguir existiendo.
Existen infinidad de países cuya realidad es mucho más criticable que la de Israel, naciones gobernadas por tiranos sanguinarios,  y nadie las critica ni se propone desmembrarlas.
Quizá Israel no sea ningún chollo, como aliado; pero Occidente no puede consentir que sus enemigos se alcen con la victoria sobre el estado judío, no sólo por cuestiones humanitarias sino puramente egoístas: esa victoria sería el prólogo de una ofensiva masiva contra Occidente. Como esto siga así tendremos en breve que apuntarnos voluntarios para ir a luchar en plan Brigada Lincoln junto a los hebreos; tiempo al tiempo...

martes, 13 de abril de 2010

1300 años de Islam en España

El decimotercer centenario de la llegada de Tarik exige una justa conmemoración
El pasado 31 de marzo un grupo de musulmanes austríacos fue a montar el numerito a la Catedral de Córdoba. Querían organizar el rezo entre las bellas columnas de la Catedral. Naturalmente, el objetivo final consistía en conseguir algo de publicidad. La organización Junta Islámica que preside Mansur Escudero lamentó los "enfrentamientos" -o sea, que los vigilantes son tan culpables como los infractores- y subrayó que en el fondo los musulmanes austríacos tenían razón, ya que el "uso compartido ecuménico del templo (..) hubiera evitado incidentes". Setienismo puro.
A uno le dan ganas de ir a Estambul a organizar el gran exorcismo de ZP en Santa Sofía, o exigir a la embajada de Arabia Saudí que permita la construcción de al menos una parroquia, ¡una! en su ecuménica nación. Algunas de las mezquitas más importantes del mundo se alzan sobre antiguos templos cristianos, como la Mezquita de los Omeyas y la de Alepo, en Siria. ¿Os imagináis a los musulmanes autorizando a los judíos a reconstruir el Templo en la mezquita de Al-Aqsa?
Pero me temo que en los países musulmanes no se limitarían a mandarnos guardias para reconvenirnos sino que nos cortarían la cabeza, y la verdad, reconozco mi carácter bovino. Yo no estoy hecho con la pasta de los mártires.
Sobre la capacidad de evolución del Islam, basta reproducir la noticia publicada anteayer de que siete mil ulemas marroquíes consideraron que predicar el evangelio en Marruecos es terrorismo, ¡nada menos!
Leyendo un viejo libraco sobre Santa Natalia, caigo en la cuenta de que el próximo año, 2011, se conmemorarán nada menos que trece siglos de la llegada del Islam a España. Las huestes de Tarik supieron aprovechar las tradicionales divisiones de los españoles en dos bandos que tan grandiosos resultados nos han reportado. Ignoro cómo lo celebrarán los hijos de Osama, el bien nombrado, ¿nos volarán algún tren en nombre de Alá el Compasivo y el Misericordioso?
Digamos que la relación de España con el Islam no es, nunca ha sido, un camino de rosas y los leones que adornaban la entrada del Congreso de los Imputados se fundieron con los cañones tomados al enemigo en 1860, hace justo siglo y medio. Podemos apostar que nadie recordará el aniversario de Wad Ras y menos un Gobierno partidario de la rendición preventiva como única estrategia.

Mirameba ministro
Pero la situación va a cambiar, y vamos a mejorar sensiblemente nuestras relaciones con el mundo que le reza a Alá. Como todos sabéis, el presidente Rodríguez me tiene entre sus más íntimos confidentes y me ha chivado la próxima reforma del Ministerio de Asuntos Exteriores: ¡sale Moratinos! En el fondo, don Francisco es diplomático de carrera y sabe idiomas; ser competente y profesional en el actual Gobierno resulta difícil de admitir. Así que el vallisoletano va a nombrar ¿a quién? ¡No lo podéis adivinar! ¡A Paco Mirameba! ¡Por fin! Desde los tiempos de las bolsas de Sol Meliá de Matutes y la cosoberanía de Piqué, echábamos en falta algo de creatividad en Exteriores; ya llegamos donde debíamos llegar. He entrevistado a Mirameba en su residencia de Ciempozuelos, y me ha proporcionado algunos elementos de su programa para solucionar los contenciosos con el mundo islámico y celebrar dignamente el aniversario de la llegada de Tarik.

Primera medida: regalar Algeciras a Marruecos
El objetivo es claro. Llevamos tres siglos de contencioso con los británicos y no hemos sido capaces de echarlos, ni siquiera envenenando a los monos o mandándoles a Carmen de Mairena. Así que, le regalamos Algeciras al moro, que la mejor forma de llevarse bien con los de Albión consiste en no ser vecinos suyos. De este modo el marrón se lo come Mohammed VI y nosotros ya nos podremos dedicar a profundizar nuestras relaciones con nuestros queridos aliados británicos que tanto nos admiran. Incluso tiene Mirameba escrito el discurso de Su Majestad Católica para hacer la entrega: “Siguiendo los pasos de mi antecesor el Invicto Caudillo que regaló patrióticamente el Rif al padre de mi Hermano Mayor, es un alto honor para mí obsequiar a mi Hermano Menor con esta hermosa bahía de Algeciras. Alá guarde muchos años a la ilustre casa Alauita”.
Al acto asistirá emocionado el coronel Gadafi, el que llama a la Yihad contra Suiza, acompañado supongo por su amigo Aznar, al que regalará otro caballo, y en su lujosa villa Felipe el Tangerí brindará por la eterna reconciliación y amistad de España y Marruecos. Una semana después, las huestes marroquíes harán una Marcha Verde sobre la roca de Tarik, y nosotros a disfrutar viendo marroquíes e ingleses estableciendo un fecundo diálogo territorial euroafricano.

Segunda medida: lapidar monjas y ahorcar curas
En efecto, uno de los problemas que le ha surgido a la Alianza de Civilizaciones, consiste en esa manía mora de  andar lapidando mujeres o ahorcando gays, que no queda bien en la foto. Por otra parte, la ilusión de Rodríguez consistiría en proclamar festivo el Día de la Checa (6 de noviembre, en inglés Paracuellos's Day) y la única razón por la que no le pegan ya mismo fuego a iglesias y conventos, a pesar del intento de Majadahonda, es por el precio de la gasolina, que dice Miguel Sebastián que hay que ahorrar, y eso que desde Kaos en la Red nos recuerdan que la única iglesia que ilumina es la que arde. Entonces, ¿qué hacer? ¿Cómo coordinar al Ayatolá de la Cristofobia con los mandamientos del Profeta? La solución de Mirameba es perfecta: se puede lapidar mujeres, siempre que sean monjas, o ahorcar curas ya que son todos pedófilos, ¿no? ¡Algún gay habrá entre los pederastas! Así unimos lo útil con lo agradable y conseguimos un joint venture entre el Islam y la Izquierda, que al fin y al acabo las dos empiezan con I. ¡Ya tienen algo en común!

Tercera medida: convertir la Catedral de Córdoba en Mezquita.
Los recientes incidentes en la catedral de Córdoba nos recuerdan la obligación de profundizar en el diálogo interreligioso. La parte gótica de la catedral de Córdoba no pega ni con cola con la columnata, así que siguiendo el ejemplo civilizador del Islam en Santa Sofía, le ponemos cuatro minaretes a la catedral y quitamos todas esas chorradas de vírgenes, santos y relicarios.
Esa medida se complementará e imitará en otras ciudades como Madrid, donde se hará entrega de la Almudena, que como su nombre indica, se encuentra en el antiguo recinto musulmán, a un tiro de piedra de la muralla mora y junto al parque Mohammed I.

Son muchos más los puntos que aborda Mirameba en su Plan de Ordenación Religiosa y Renovación Occidental, (PORRO). Este Gobierno necesita urgentemente el PORRO de Mirameba, y espero que el nombramiento del ilustre atenéista abrirá nuevas perspectivas.

Luis Español